Las Tiny Houses, en castellano “casas diminutas” están causando sensación. Estos minúsculos espacios vitales, a menudo de no más de 15 a 45 metros cuadrados, están diseñados para situar el minimalismo, la sostenibilidad y la movilidad en el primer plano del estilo de vida. Ofrecen una respuesta a la escasez de vivienda, los altos costes de construcción y el aumento de los precios del alquiler y la energía. Los hermanos Gelzhäuser, que regentan un bosque en Kierspe, también han ideado un proyecto especialmente sostenible y ahorrador de recursos. La "Organic Tiny House" (sitio web en alemán) se basa en el principio de la economía circular y el uso sostenible de los recursos. Una idea surgida de una crisis.
A los hermanos Lisa y Timo Gelzhäuser se les ocurrió la idea de la Organic Tiny House cuando se enfrentaban a la pérdida de su bosque familiar. Como consecuencia de la sequía y la plaga de escarabajos de la corteza, los abetos del bosque Gelzhäuser habían muerto. Para salvar su negocio familiar y hacer algo bueno por el medio ambiente al mismo tiempo, a los hermanos se les ocurrió la idea de construir casas con la llamada madera de calamidad. La madera de calamidad es madera de árboles muertos que no tiene plagas y puede utilizarse de forma sostenible.
La Organic Tiny House se basa en los principios de la economía circular y la construcción sostenible. Los componentes de la casa se fabrican casi exclusivamente en los alrededores de Kierspe, en la región de Sauerland, Alemania, para minimizar la huella de CO2. Cortan la madera de calamidad en su propio aserradero y la procesan con materiales naturales sin utilizar productos químicos. Así, la microcasa garantiza un alto nivel de salubridad en un entorno libre de contaminantes y, por tanto, también es apta para alérgicos.
Una característica especial de la Organic Tiny House: es modular, es decir, está dividida en módulos que pueden combinarse individualmente. Ya sea la forma del tejado, el tamaño o el mobiliario, la Organic Tiny House puede personalizarse de muchas maneras. El módulo más sencillo ofrece algo menos de 20 metros cuadrados de espacio habitable, tiene un tejado plano y cuesta unos 75.000 euros.
A la hora de amueblar la Organic Tiny House, los hermanos Gelzhäuser optaron por soluciones innovadoras y de alta calidad. Para la calefacción disponen de opciones modernas, como una bomba de calor por aire o calefacción por infrarrojos. La energía se suministra de forma respetuosa con el medio ambiente a través del tejado: se instala de serie un paquete solar básico con seis módulos y un inversor, y existe la opción de ampliarlo con capacidad de almacenamiento adicional o módulos de fachada. Para la casa piloto de Kierspe, los hermanos eligieron interruptores y bases de enchufe de la serie de diseño Gira E2 en negro mate. El diseño minimalista y el material de alta calidad se integran armoniosamente en el interior.
La Organic Tiny House ofrece una alternativa confortable y respetuosa con el medio ambiente en la vivienda contemporánea. El proyecto demuestra de forma impresionante cómo pueden utilizarse enfoques creativos y el principio de la economía circular para hacer realidad conceptos de vivienda con visión de futuro.