En medio del barrio de l‘Eixample se encuentra el hotel de diseño Cram de 4 estrellas. Un barrio que se denomina con frecuencia el cuadrado de oro, por la elegancia de la zona.
Barcelona, España
Los bloques de edificios del barrio L’Eixample en Barcelona son cuadrados en su totalidad y tienen grandes patios interiores, hoy en día en su mayoría edificados. La parte central de este barrio se denomina con frecuencia el cuadrado de oro, por la elegancia de la zona. La calle principal Passeig de Gràcia, flanqueada por elegantes boutiques y restaurantes de alta cocina, conduce hacia el norte y une el centro medieval con el barrio artístico de Gràcia .
En medio del barrio de l‘Eixample se encuentra el hotel de diseño Cram.
Un equipo de arquitectos de GCA diseñó en 2005 este hotel, integrado en un edificio de 1892. La luz, como elemento de diseño, juega aquí un papel fundamental. Un patio interior cilíndrico distribuye luz natural a las siete plantas. Esto no implica que todo esté inundado de luz. Todo lo contrario: la luz se aplica de manera original, siempre en forma indirecta y a juego con la estética más bien oscura de la casa. En el vestíbulo predominan los tonos apagados: el granito oscuro hace juego con los suelos de madera oscura y los techos y telas negros
El hotel está destinado exclusivamente a parejas, es decir, no hay ni habitaciones individuales ni camas extra para niños. En las 67 habitaciones dominan los tonos rojo y naranja y, de nuevo, la iluminación juega un papel fundamental. Los huéspedes pueden crear su propia atmósfera regulando la
iluminación a ambiente de “bienvenida”, “fiesta”, “romántico” o “luz nocturna”. La gama de interruptores seleccionada fue Gira Standard 55, una línea funcional básica para una instalación eléctrica cómoda y rentable.
En el séptimo piso se encuentra el bar-terraza ANEMOS con una hermosa vista de la ciudad. Desde la hora del desayuno hasta la medianoche, se ofrece a los clientes delicias culinarias. También es posible refrescarse en la piscina. Quienes prefieran una cocina fuera de lo común pueden dejarse seducir por las delicias que preparan el chef y el equipo del restaurante Angle, distinguido con un estrella Michelin. En el exclusivo Mareva Cocktail Bar se concluye el día en un ambiente animado.
Por la alta calidad de sus servicios, el Hotel Cram recibió el sello de calidad HolidayCheck Quality Selection en 2014.
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