Si se planifica una casa energéticamente eficiente, la orientación del edificio constituye el primer paso lógico. Y tanto más si se construye en Mallorca. Así que el arquitecto Miquel Lacomba orientó la casa pasiva en el valle de Puigpunyent de forma óptima hacia el sur y sin desperdiciar las hermosas vistas a las montañas de la Tramuntana. El nuevo hogar de dos pisos para una familia de cuatro miembros está compuesto por una amplia zona de salón y comedor con cocina contigua en la planta baja, que se abre a una gran terraza con pérgola. En la planta superior hay tres dormitorios con orientación sur y una sala polivalente como estudio. Todas las habitaciones tienen amplios ventanales con elementos desplazables de protección solar de madera antepuestos.
Gran parte de las medidas de eficiencia energética de la construcción son de carácter pasivo; además de la orientación sur y del control selectivo de la radiación solar, también desempeñan un papel importante los componentes que almacenan energía, un aislamiento de alta calidad y un intercambio de aire controlado con recuperación de calor. Además, en las cálidas noches de verano también es posible una ventilación transversal proveniente de la refrigeración natural del valle circundante. Naturalmente, en el salón no puede faltar una chimenea para calentar de forma tradicional y acogedora. Una instalación fotovoltaica en el techo satisface la demanda de electricidad. De este modo, en conjunto se ha creado un edificio con consumo energético cero que, además, reduce también casi a cero las emisiones de CO2 de los materiales.
Para la elección de los materiales, los componentes e incluso el contratista, se concedió gran importancia a la reducción de la huella de carbono. Conforme al “concepto de kilómetro cero”, se seleccionaron empresas locales que, siempre que fuera posible, debían utilizar materiales de construcción locales. Entre ellos se encuentran la madera procedente de bosques gestionados de manera sostenible en la zona, así como los ladrillos mallorquines, los revoques de cal natural y el aislamiento de corcho. También se prestó atención a la ausencia de COV en todos los revestimientos de superficies, por ejemplo dando prioridad al tratamiento de madera a base de aceite o a las pinturas minerales y transpirables. Los interruptores y bases de enchufe montados de la gama Gira E2, variante de montaje plano en blanco mate, no se fabricaron en Puigpunyent, sino en Radevormwald, pero se adecúan a la perfección a la idea básica purista de la sencillez sin concesiones. Para una vivienda agradable con calidad sostenible.
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