Un hogar inteligente ofrece muchas ventajas, y la tecnología de edificios permite una gran comodidad, seguridad y una mejora de la eficiencia energética en el hogar y en el trabajo. La conexión en red en toda la casa automatiza los procesos, permite la integración de los más diversos dispositivos y funciones y puede adecuarse por completo a las necesidades de los habitantes del hogar y de los usuarios.
Sin embargo, justamente debido a la amplia conexión en red y al ajuste individual conforme al comportamiento de los usuarios, la protección de datos personales y la seguridad de los datos técnicos son temas particularmente importantes que deben tratarse de manera adecuada. Esto atañe a todos los dispositivos de red y servidores que se utilizan en un hogar inteligente. Los dispositivos conectados en red pueden intercambiar señales y datos de manera permanente. Estos datos deben protegerse contra miradas y accesos no deseados, ya que en la red de un edificio siempre se trata de datos personales y confidenciales, como por ejemplo la cantidad de habitantes, las horas de presencia o ausencia, el comportamiento de los usuarios y a menudo también de imágenes de cámaras en las que se muestran personas. Además es necesario proteger al propio sistema y los datos de acceso contra manipulación y acceso por parte de terceros.
Es posible contar con una protección fiable. Lea para ello las siguientes recomendaciones.